La nariz suele ser una de las partes de la cara que más descontento genera entre las personas adultas. Y, ya sea por razones puramente estéticas o por otras más relacionadas con aspectos de la salud, el paso por el quirófano suele ser la única vía de escape que todos se plantean para poner fin a los problemas. Lo que no está tan extendido es el conocimiento de otras alternativas de medicina estética menos invasivas.
Sin necesidad de recurrir al bisturí y de la mano de profesionales especializados como los de la Clínica Palmamédica, se pueden conseguir resultados notables (aunque limitados). Es el caso de la rinomodelación, un tratamiento estético que por medio de inyecciones de sustancias de relleno en zonas muy concretas de la nariz consigue modificar su aspecto.
Esta innovadora técnica va ganando poco a poco adeptos y ya es considerada por muchos como la rinoplastia sin cirugía. Desde Palmamédica, como especialistas en medicina estética, preferimos considerarla la alternativa ideal para pequeñas imperfecciones. Si aún no la conoces, te la presentamos.
Qué es la rinomodelación y para qué podrías necesitarla
Ni la rinoplastia es mala ni la rinomodelación es la panacea para todos los problemas estéticos de la nariz. Son dos técnicas diferentes y cada una de ellas está indicada para casos concretos. La primera consiste en una intervención quirúrgica y es el único tratamiento de medicina estética que puede modificar de manera permanente la fisonomía de la nariz: el tamaño, la forma, la abertura de los orificios nasales… Es decir, los problemas más grandes de esta parte de la cara – desde el punto de vista de la salud y de la estética – necesitan la intervención del bisturí y de un cirujano experimentado.
La rinomodelación, por su parte, es la alternativa para las pequeñas imperfecciones. Por medio de esta innovadora técnica, se puede conseguir levantar la punta de la nariz, suavizar algún defecto en la forma o corregir pequeñas desviaciones. Pero, aunque sea un procedimiento rápido, sencillo y ambulatorio, también exige la participación de un cirujano especializado y con suficiente experiencia. Como cualquier otro tratamiento de medicina estética, la rinomodelación conlleva riesgos si no es ejecutada de manera correcta y exige la valoración previa del candidato, así como la revisión posterior a la intervención.
Si tienes miedo al quirófano o si solo necesitas un retoque suave de algún punto concreto de la nariz, probablemente con la rinomodelación sea suficiente. A través del relleno con ácido hialurónico – técnica que también se utiliza para otros tratamientos de medicina estética a los que damos respuesta en este post– y en menos de una hora, podrás salir de la clínica con el cambio ya realizado.
Ponte en contacto con nosotros para pedir cita, deja que nuestros especialistas evalúen tu caso y, en pocos días, sabrás si puedes eludir el quirófano para ese cambio estético que tanto tiempo llevas deseando.