El biofeedback es una nueva técnica que se apoya en la tecnología para que los pacientes identifiquen las situaciones tensas, visualicen la calma y aprendan a controlar el estrés.
Se ha comprobado que utilizando ciertas técnicas, las personas pueden entrenarse para controlar sus variables fisiológicas, tales como la respiración y la tensión y así gestionar el estrés y sus consecuencias con el dolor de cabeza o la tensión muscular, etc.
El método es simple y sencillo; después de una primera evaluación general, sobre el estado de salud y el perfil de estrés del paciente, a través de la colocación de unos electrodos, se pueden visualizar en tiempo real los procesos fisiológicos que tienen lugar en el cuerpo, y se pueden medir parámetros como la tasa cardíaca, tensión muscular, volumen del flujo sanguíneo, respiración, fuerza, ondas cerebrales, etc. Se monitoriza mientras el paciente pasa de no hacer nada a realizar actividades cada vez más estresantes, y se evalúa la fase de recuperación tras cada prueba.
Con este método el paciente aprende a conocer las situaciones que le estresan y qué debe hacer para controlarlas. A base de ejercicios de entrenamiento la persona consigue autorregular su estado físico y mental y responder adecuadamente a las situaciones estresantes.
El estrés, la gran plaga de nuestro siglo
Cada vez con más frecuencia la forma de vida y los acontecimientos incluso cotidianos (el tráfico, la falta de tiempo, etc.), nos llevan a decir que estamos estresados, pero realmente qué entendemos por estrés.
Entre las distintas definiciones que hemos encontrado la siguiente es la que nos parece más apropiada:
Estrés (del inglés stress, ‘tensión’) es una reacción fisiológica del organismo en el que entran en juego diversos mecanismos de defensa para afrontar una situación que se percibe como amenazante.
Sin embargo, el estrés es una respuesta natural y necesaria para la supervivencia, a pesar de lo cual hoy en día se confunde con algo negativo, incluso con una enfermedad. Esto es debido a que este mecanismo de defensa puede acabar, bajo determinadas circunstancias frecuentes en ciertos modos de vida, desencadenando problemas graves de salud.
Cuando esta respuesta natural se da en exceso, el organismo humano se altera y puede dar lugar a la aparición de enfermedades y alteraciones que impiden el normal desarrollo y funcionamiento del cuerpo humano.
Cuando sufrimos situaciones estresantes de forma prolongada, lo denominamos estrés crónico. Con este tipo de situación se suelen tener cuadros de ansiedad y otros trastornos, entonces es cuando realmente debemos prestarle atención y solicitar la ayuda de un especialista.
El estrés se manifiesta a:
• 1.- A nivel emocional o psicológico: Inquietud, irritabilidad, nerviosismo, miedo, dificultad de concentración, pensamientos negativos, la sensación de que la situación nos supera, etc.
• 2.- A nivel de conducta: Moverse constantemente, risa nerviosa, rechinar los dientes. tics nerviosos, problemas sexuales. Comer en exceso o dejar de hacerlo, beber o fumar con mayor frecuencia, dormir en exceso o sufrir de insomnio, etc.
• 3.- A nivel físico: músculos contraídos, dolor de cabeza, problemas de espalda o cuello, malestar estomacal, fatiga, infecciones, palpitaciones, opresión en el pecho, sequedad de la boca, dificultad para tragar o respirar, etc.
Una situación estresante que no se soluciona, puede provocar un círculo vicioso.
Un problema nos causa estrés. Si éste se mantiene, aumentan nuestros problemas o nos cuesta más trabajo solucionarlos. Como consecuencia el estrés se incrementa y se vuelve a dar todo el proceso.
Cuando esta situación se prolonga, surgen problemas de salud o repercute en otras áreas de la vida de la persona.
De ahí la importancia de la nueva TÉCNICA del biofeedback, La diferencia entre esta técnica y otras metodologías es que no se utilizan fármacos. Tampoco es invasiva, ni tiene efectos secundarios, pues los sensores no emiten ninguna señal dañina. Además es compatible con otras terapias, como la psicoterapia.
El biofeedback está avalado científicamente y recomendado incluso como tratamiento de primera línea para múltiples aplicaciones, siempre junto con la labor de profesionales cualificados.