El Botox es el tratamiento idóneo para tratar aquellas arrugas que se forman como consecuencia de los movimientos expresivos faciales. Constituye la consulta más de demandada por los varones pues al tener una musculatura más fuerte, suelen marcar más las arrugas de expresión.
El Botox es uno de los tratamientos más valorados por los hombres que desean cuidar su apariencia sintiéndose bien con ellos mismos, es poco invasivo y menos costoso que otros tratamientos de rejuvenecimiento facial, aportando también la importante condición de conservar el aspecto natural del rostro.
El tratamiento consigue un aspecto más joven manteniendo la naturalidad, relajando los músculos y manteniendo la expresividad el rostro. Es decir se mantienen las facciones recuperando la jovialidad. Su aplicación es sencilla y rápida, lo que permite planificar sesiones con el médico muy fáciles de compaginar con la agenda y regresar de inmediato a las actividades diarias. Apenas 15 min tras la aplicación del producto desaparece el edema de los puntos de inyección y resulta imperceptible que se haya realizado ningún tratamiento.
El Botox es una proteína purificada que actúa relajando la musculatura en el sitio de aplicación, impidiendo la contracción del músculo y la formación de las líneas y arrugas de expresión. La toxina botulínica, bloquea la transmisión del impulso nervioso a nivel del músculo. Esto produce su debilitamiento e interfiere por lo tanto con su contracción. De esta manera, al estar el músculo en reposo, la piel que lo cubre se relaja y las líneas de expresión se van suavizando y disminuyendo progresivamente.
La aplicación del Botox para disminuir arrugas consiste en su inyección directa en el músculo específico, se realiza en consultorio, dura aproximadamente entre 15 y 20 minutos y no requiere anestesia de ningún tipo.
La toxina botulínica se aplica en las líneas de expresión, es decir en los músculos de la frente, el entrecejo y alrededor de los ojos (“patas de gallo”). Es el médico quien ha de determinar las áreas a tratar.
Los resultados del tratamiento se comienzan a notar aproximadamente pasados 2 ó 3 días, se sentirán los músculos relajados y las arrugas disminuirán o desaparecerán totalmente. La mejoría del aspecto continuará durante el transcurso de los 15 días siguientes, hasta que se logren los resultados finales, luego de manera gradual el efecto disminuye requiriéndose nuevas aplicaciones alrededor de los 4 a 6 meses, dependiendo de los casos, aunque a medida que se realizan más sesiones, el efecto va durando más tiempo (más de 6 meses).
Cuidados después del tratamiento con Botox:
Durante las 4 horas siguientes se debe evitar tocar, masajear o maquillar la zona donde se realizó el tratamiento. Evitar exponerse al calor y procurar permanecer en posición vertical.
¿Presenta algún riesgo el tratamiento con Botox?
Estudios clínicos a lo largo de más de 20 años prueban y certifican que se trata de una terapia segura, eficaz y bien tolerada. Simplemente se deben respetar las dosis y zonas adecuadas. Por eso es importante que el tratamiento sea realizado por un médico especialista en medicina estética, que es quien sabe las zonas donde deben aplicarse las dosis para cada tipo de arruga.
Las múltiples cualidades del Botox lo hacen idóneo, no sólo para uso estético, sino que se utiliza en la práctica médica para tratar patologías como las migrañas, espasmos y contracciones musculares involuntarias, incontinencia urinaria, hiperhidrosis (exceso de sudoración), etc.
Preguntas frecuentes del tratamiento con Botox:
– ¿Después de seguir el tratamiento y si dejo de hacerlo mis arrugar van a empeorar
NO. Las arrugas volverán al lugar que tenían antes del tratamiento y además habrás realizado prevención para evitar el empeoramiento y la aparición de nuevas líneas de expresión.
– ¿Los músculos quedarán rígidos de forma permanente?
NO. Después de unos meses el efecto de la toxina comienza a desaparecer y las arrugas de expresión empiezan a notarse. Aunque después de dos sesiones el paciente nota que los efectos son más duraderos. Los músculos se relajan sin llegar a paralizarse de modo que se conserva la expresividad natural del rostro.
– ¿Existen en el mercado cremas con efectos similares al Botox?
NO. Las cremas sólo pueden penetrar en la piel de forma superficial, mejorando su aspecto e hidratación, pero ninguna crema es capaz de actuar a la profundidad del músculo que forma la arruga.
El tratamiento de altamente demandado, mejora el aspecto de muchos hombres que pueden ver rejuvenecido su rostro tras la sencilla y rápida aplicación de este producto en consulta.
