El peeling químico es una técnica utilizada para mejorarla calidad de la piel. Consiste en la eliminación de distintas capas de la epidermis mediante la aplicación de un agente químico. Esto produce una intensa regeneración celular de manera que las capas de la piel se renuevan siendo sustituidas por otras nuevas de mejor calidad, con menos manchas y mejor textura. Otros de los múltiples beneficios es el aumento del colágeno que mejora las arrugas de expresión y el control sobre la grasa y las bacterias en las pieles acneicas.
Se utiliza también para mejorar el aspecto de la piel dañada por el sol, mejorar las cicatrices de acné y decolorar o eliminar manchas. En función de los efectos requeridos se elegirá un agente químico u otro. Tiene un poder de penetración diferente, es decir, eliminará más o menos capas de piel y por ello existen peelings superficiales, medios y profundos. A mayor profundidad, mayores efectos pero también más riesgos. Aunque está indicado en casos de envejecimiento fisiológico o solar y para el tratamiento de manchas y acné, también puede emplearse como un tratamiento de mantenimiento. El superficial, por ejemplo, nos ayuda a mantener una piel sana, tersa, libre de impurezas y luminosa.
Entre las sustancias empleadas se encuentran el fenol y los ácidos glicólico, tricloracético, mandélico, salicílico y kójico. La elección de estas sustancias dependerá del objetivo del tratamiento como por ejemplo el ácido salicílico ha demostrado ser muy eficaz como tratamiento antiacnéico y el ácido kójico como despigmentante. En todo caso se consigue mejorar la calidad de la piel y la producción de colágeno y elastina.
Como hemos explicado anteriormente, en función de la profundidad se obtienen unos objetivos u otros:
– El peeling superficial: Cierra los poros, atenúa las arrugas finas. Además, aporta luminosidad, uniformidad al tono de la piel y un aspecto más juvenil y saludable. Este tipo de peeling ayuda a controlar el acné, las foliculitis y las secreciones sebáceas, y pone a la piel en mejores condiciones para recibir cualquier tipo de tratamiento dermatológico.
– El peeling medio: actúa sobre las arrugas finas y de profundidad media y también permite atenuar las manchas producidas por el sol. Este tratamiento es eficaz en casos de envejecimiento solar o prematuro que no se quieran someter a uno profundo.
– El peeling profundo: consigue actuar sobre las arrugas superficiales, medias y profundas, elimina las manchas solares. Asimismo, produce la retracción de la piel, lo que ayuda a mejorar notablemente los problemas de flaccidez. Se observa en general una notable mejoría. El más empleado es el peeling de fenol.